Después de una primera toma de contacto en noviembre, la obligada pausa invernal de diciembre y enero ha impedido a Marc Márquez seguir acumulando kilómetros con su nueva Moto2. El piloto Repsol regresará en breve a los circuitos para completar la adaptación a la nueva categoría.
Antes de que llegue ese momento, Márquez analiza detenidamente en el vídeo adjunto la montura que le acompañará esta temporada en su nueva aventura en Moto2. Un completo repaso a los componentes de una máquina muy distinta a la que utilizó para proclamarse Campeón del Mundo de 125cc el año pasado.
En Moto2, una categoría en la que todos los pilotos llevan el mismo motor -es la organización quién los entrega precintados-, las milésimas deben arañarse al reloj cuidando todos los detalles. Éstos van desde la elección del proveedor de las suspensiones, los frenos, el tubo de escape, o hasta el diseño del carenado, en este caso realizado en el túnel del viento a medida del piloto leridano.
Sin embargo, es a nivel del chasis donde se marcan las mayores diferencias. Marc Márquez y su equipo han apostado por un chasis Suter, fabricante suizo que el año pasado ya demostró su gran potencial y capacidad de evolución.
Para afrontar el reto de la nueva categoría al máximo de sus posibilidades, el pupilo de Emilio Alzamora ha aprovechado el paréntesis invernal para llevar a cabo un plan de entrenamiento físico diseñado para ganar fuerza y mejorar así su control sobre una moto mucho más pesada que la de la temporada pasada. Márquez ha completado su preparación practicando otras disciplinas como motocross o mountain bike, y ya se muestra impaciente por volver a enfundarse el mono para preparar la inminente temporada 2011.
Antes de que llegue ese momento, Márquez analiza detenidamente en el vídeo adjunto la montura que le acompañará esta temporada en su nueva aventura en Moto2. Un completo repaso a los componentes de una máquina muy distinta a la que utilizó para proclamarse Campeón del Mundo de 125cc el año pasado.
En Moto2, una categoría en la que todos los pilotos llevan el mismo motor -es la organización quién los entrega precintados-, las milésimas deben arañarse al reloj cuidando todos los detalles. Éstos van desde la elección del proveedor de las suspensiones, los frenos, el tubo de escape, o hasta el diseño del carenado, en este caso realizado en el túnel del viento a medida del piloto leridano.
Sin embargo, es a nivel del chasis donde se marcan las mayores diferencias. Marc Márquez y su equipo han apostado por un chasis Suter, fabricante suizo que el año pasado ya demostró su gran potencial y capacidad de evolución.
Para afrontar el reto de la nueva categoría al máximo de sus posibilidades, el pupilo de Emilio Alzamora ha aprovechado el paréntesis invernal para llevar a cabo un plan de entrenamiento físico diseñado para ganar fuerza y mejorar así su control sobre una moto mucho más pesada que la de la temporada pasada. Márquez ha completado su preparación practicando otras disciplinas como motocross o mountain bike, y ya se muestra impaciente por volver a enfundarse el mono para preparar la inminente temporada 2011.
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