La carrera de Gabriel Agbonlahor, delantero del Aston Villa y de la selección de Inglaterra, está sufriendo altibajos importantes esta temporada, como reconoce el propio jugador. Después de haber alcanzado cifras de dos dígitos en tres campañas seguidas, las lesiones han hecho mella en este atacante nacido en Birmingham hasta el punto de que ha visto puerta únicamente dos veces en los 20 partidos que ha disputado. Sin embargo, también tiene razones para sentirse satisfecho: el joven de 24 años firmó en noviembre un contrato por cuatro años y medio más con el club que lo ha visto crecer, y admite que desea seguir en la entidad toda la vida.
FIFA.com se reunió recientemente con Gabby Agbonlahor para hablar del respetado sistema de formación del Aston Villa (donde pulió su talento y su velocidad pasmosa), de su participación con Inglaterra y de su futuro en el fútbol de clubes y en el internacional.
¿Cuál es el secreto que se esconde tras el éxito de la escuela del Aston Villa? La entrega de los jugadores, del cuerpo técnico y del equipo de formación de los juveniles ha sido decisiva para el éxito de nuestra escuela de fútbol. Justo ahora estamos empezando a disfrutar de la nueva hornada de jugadores que está accediendo al primer equipo; gente como Marc Albrighton, Ciaran Clark o Barry Bannan. ¡Que siga así muchos años!
¿Quién le ha influido más en su carrera? Steve Burns, el adjunto al director de la escuela del Villa. Lleva en el club desde que yo empecé y me ayudó mucho durante la época que pasé en el equipo juvenil. Steve fue también uno de los que me descubrieron cuando jugaba en las categorías inferiores. Tengo mucho que agradecerle en mi carrera.
¿Diría que su juego se ha perfeccionado desde que debutó en el primer equipo en marzo de 2006? Año tras año vas ganando experiencia. Creo que, por encima de todas las cosas, la experiencia es lo que me ha servido para crecer como jugador. Cuando debutas en un equipo, empiezas con unos nervios que lógicamente se disipan con el tiempo, y conforme vas perdiéndolos puedes ir mejorando tu juego. Marqué un gol el día de mi estreno con el primer equipo, en un partido contra el Everton que se saldó con nuestra derrota por 4-1. Desde entonces, la Premier League se ha puesto más difícil, como se ve clarísimamente en la tabla de esta temporada, pero al futbolista se le exige que rinda continuamente. En estos casos, la experiencia ayuda mucho. En última instancia, se trata de seguir avanzando partido a partido y de rendir lo mejor que uno pueda.
De joven, ¿quién era su ídolo futbolístico? Siempre he sido un incondicional de Thierry Henry, lo admiraba mucho. Su forma de jugar, su velocidad, su potencia y esa manera que tiene de marcar goles me impresionaban muchísimo.
Al igual que Henry, pero al contrario que muchos delanteros ingleses, usted posee una velocidad pasmosa. ¿Diría que resulta ventajosa para su juego? La velocidad es siempre una gran baza. En el caso de algunos delanteros, la rapidez no destaca como una de sus principales cualidades, pero sobresalen en otros aspectos. Resulta ventajosa porque preocupa a los defensas. Les obliga a defender de una manera distinta, y puede cambiarles los esquemas a la hora de lidiar contigo. Yo tengo la suerte de correr mucho de natural. Cuando estaba en la escuela, participaba en muchas carreras de velocidad, especialmente en los 100 metros lisos. No sé bien cuánto tardaría ahora en recorrerlos, pero seguro que soy el jugador más veloz del club.
Para su carrera internacional, usted podía elegir entre Nigeria, Escocia e Inglaterra. ¿Le parece que tomó la decisión correcta? Nací en Inglaterra, de manera que mi elección fue la más normal y lógica. Sin embargo, no he tenido demasiada suerte con la selección. Cada vez que me han convocado he estado lesionado, y no han querido que me arriesgara. Las lesiones me han impedido llegar a más con Inglaterra. Precisamente por eso tuve que retirarme de la última convocatoria [para los partidos contra Gales y Ghana].
¿Qué significa para usted jugar con Inglaterra? Bueno, jugar un solo partido ya hubiera sido fantástico, ¡cómo voy a quejarme por haber participado en tres! Además, todavía tengo mucho tiempo por delante. De todas formas, nunca olvidaré el día de mi estreno. Cuando me enteré de que iba a ser titular contra Alemania en mi debut, me puse como loco de contento, pero estaba hecho un manojo de nervios porque sabía que iba a representar a mi país. Aquel día, mi debut con el Villa y mi primer gol contra el Birmingham City son los momentos más destacados de mi carrera. Estoy deseando recibir de nuevo la oportunidad de enfundarme la camiseta de Inglaterra.
¿Le dolió no formar parte de la selección inglesa que viajó a Sudáfrica 2010?Me dolió, pero sabía que era difícil llegar a ese combinado. Ni siquiera algunos de los mejores consiguieron la convocatoria. Para todos nosotros, entrar en la selección inglesa supone en realidad una recompensa. En mi caso, espero que se presente la oportunidad de demostrar mi valía en el futuro, y confío en ayudar a mi país a clasificarse para la EURO 2012.
¿Qué cree que le depara el futuro en su club y en el fútbol internacional? De momento, centro toda mi atención en conseguir minutos y en jugar cada vez más con el Villa. Me considero un hombre de un solo club, porque me parece muy importante que así sea. Ojalá pueda seguir aquí muchísimo tiempo. Hace poco renové mi contrato y, si por mí fuera, me quedaría en Villa Park toda la carrera. Ojalá lo consiga.